El discurso del odio en las redes sociales – #porunusolovedelatecnología – Orange – Incibe – jupsin.com
- Uno de los principales entornos digitales donde podemos detectar el ciberodio es el de las redes sociales. Por este motivo, se trata de una conducta habitual entre los adolescentes.
- Es importante transmitir a nuestros hijos valores basado en el respecto y la tolerancia fomentando el diálogo sobre lo que ven en internet.
- Difundir ciertos discursos en Internet constituye un delito de odio, por lo que el Código Penal habilita a los jueces y tribunales a destruir, borrar y retirar los contenidos de Internet.
El discurso del odio o ciberodio es la difusión de ideas, lemas, actitudes e incluso conductas a través de Internet que menosprecien, ataquen y humillen a otras personas.
Suele dirigirse a colectivos concretos y promueve contenidos intolerantes por motivos de raza, género, sexualidad o religión.
Existen perfiles concretos, ‘haters’, que disfrutan instigando a través de comentarios ofensivos o mensajes hirientes
Uno de los principales entornos digitales donde podemos detectar el ciberodio es el de las redes sociales. Por este motivo, se trata de una conducta habitual entre los adolescentes.
La desinhibición, el anonimato y la exposición a todo tipo de contenidos, son ingredientes para promover comportamientos irrespetuosos entre los usuarios.
Existen perfiles concretos, más popularmente conocidos como ‘haters’ que disfrutan instigando a otros a través de comentarios ofensivos o mensajes hirientes.
Respeto y tolerancia contra el discurso del odio
Es importante transmitir a nuestros hijos valores basado en el respecto y la tolerancia fomentando el diálogo sobre lo que ven en internet:
- Cuando nuestro hijo es la víctima: si conocemos que nuestro hijo es víctima del discurso del odio en internet, debemos reaccionar rápidamente.
Si es nuestro hijo el que promueve el odio: cuesta situarnos en esta situación, pero cuando ocurre, nuestro deber es intervenir
- Lo primero es no cuestionarle. A través de esta confianza podremos podremos tratar de encontrar los motivos por los que el menor entró en contacto con esa comunidad y podremos tratar el origen de este comportamiento.
- Si es nuestro hijo el que promueve el odio: cuesta situarnos en esta situación, pero cuando ocurre, nuestro deber es intervenir.
- La irritabilidad, el aislamiento, la desmotivación y la inclinación hacia ideologías inusuales, pueden ser señales de que algo no va bien. En este caso, es conveniente abordar abordar el asunto con el menor, informarle y enseñarle a contrastar y desarrollar su propia capacidad crítica.
- La sensibilización desde los centros escolares es clave. Es importante impulsar campañas contra el extremismo desde las aulas y fomentar el debate positivo, difundiendo valores como la tolerancia y los derechos humanos.
- Lo más importante para erradicar el ciberodio es prestar atención a la conducta de nuestros hijos y tener un discurso abierto con ellos, pero también podemos tomar una serie de acciones legales en casos extremos.
La policía ha reforzado las acciones contra el ciberodio en Internet con medidas de investigación tecnológica de mensaje ofensivos
- Para ello, existe la opción de denunciar antes las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Además, la policía española ha reforzado las acciones contra el ciberodio en Internet con la activación de medidas de investigación tecnológica de mensaje ofensivos.
- Por otro lado, debemos recordar que la Ley ampara a las víctimas. Y es que difundir ciertos discursos en Internet constituye un delito de odio, por lo que el Código Penal habilita a los jueces y tribunales a destruir, borrar y retirar los contenidos de Internet.