900 018 018, este es el teléfono contra el acoso escolar y malos tratos en los centros docentes, que ya está operativo. Alumnos, padres, docentes o cualquier otra persona pueden llamar para denunciar casos relacionados con este tipo de violencia en las aulas, a este número, gratuito, que no queda reflejado en la factura telefónica y que está operativo 24 horas al día durante todo el año.
Los destinatarios del servicio son los alumnos, padres, madres y tutores legales, profesores, equipos directivos y personal de los centros docentes, y en general cualquier persona que tenga conocimiento de casos de malos tratos o acoso en el ámbito escolar, tanto dentro como fuera del centro docente.
Ciberacoso
Se incluyen también los casos de ciberacoso, a través de internet, móviles y redes sociales, así como el ámbito internacional en nuestros centros en el exterior, centros de convenio y programas internacionales.
La intención del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte es llegar a todos los menores y a todos los supuestos de malos tratos en el ámbito escolar.
Las llamadas son atendidas exclusivamente por personal en posesión de una licenciatura o grado universitario en el ámbito de la Psicología. Pero la atención no es sólo psicológica, sino que cuenta con un equipo de trabajadores sociales, juristas y sociólogos que prestarán la atención que el menor necesite.
24 horas, los 7 días a la semana, y todos los días del año
El teléfono 900 018 018 incluye la consulta y derivación del caso a las fuerzas y cuerpos de seguridad, la inspección educativa, centros de salud, ministerio fiscal y otras autoridades e instituciones competentes, siempre de forma voluntaria, y asegurando en todo momento el anonimato y la confidencialidad de las personas que llamen si así lo desean.
El servicio es de tipo 24-7-365, es decir, se presta durante 24 horas, los 7 días a la semana, y todos los días del año.
Es gratuita, y no aparece en la factura; es decir, no deja rastro alguno.
La llamada es gratuita, y no aparece en la factura del teléfono desde el que se haga la llamada; es decir, no deja rastro alguno.
Además, se pone a disposición de los usuarios con discapacidad auditiva o del habla un servicio de mensajería de texto, así como la atención de un agente en lenguaje de signos por video-chat o video-llamada.