¿Cómo ayudo a mi hijo ‘quejica’ a superar sus preocupaciones? Abordamos en este artículo un nuevo aspecto de las Personas Altamente Sensibles.
En 2025, seguimos aprendiendo sobre el significado de ser PAS. Nos queda mucho por conocer. Para ello, contamos con la colaboración de la Asociación de Psicólogos y Profesionales de Alta Sensibilidad (PAS España).
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¿Cómo ayudo a mi hijo ‘quejica’ a superar sus preocupaciones?
Dra. Manuela Pérez Chacón
Las quejas y preocupaciones en los hijos/as son una manifestación común de sus emociones, que pueden estar relacionadas con la Alta Sensibilidad. Estas preocupaciones, aunque puedan parecer de poca importancia para los padres y madres, son reales y significativas para el niño.
A menudo, es posible infravalorar estas preocupaciones, pensando que son parte de una mala etapa o que simplemente son cosas de niños. Sin embargo, es crucial entender que las emociones de los niños deben ser validadas y abordadas de manera empática y objetiva, en especial si se trata de personas altamente sensibles (PAS).
Niños Altamente Sensibles (NAS)
Estos menores desarrollan una personalidad especial y son llamados niños altamente sensibles (NAS).
Su particularidad puede conducir a que los niños se sientan ansiosos en situaciones sociales, como al cambiar de escuela o al interactuar con nuevos compañeros, lo que genera preocupaciones sobre la aceptación o el rechazo.
Por otro lado, la forma de actuar puede generar una distorsión en cómo el niño percibe a los miembros de su familia debido a la manipulación emocional, lo que también provoca inquietudes sobre lealtades y vínculos familiares.
Experimentar el mundo con mayor intensidad
En estos casos, el niño puede no ser capaz de expresar claramente lo que siente, llevando a preocupaciones ocultas que los padres pueden no identificar fácilmente.
Los NAS experimentan el mundo con una intensidad mayor que otros niños, lo que puede amplificar cualquier tipo de preocupación. Pueden preocuparse más por los detalles, ser más sensibles a las críticas o al entorno, y ver los problemas de manera más apremiante, incluso cuando otros no lo hacen.
Esta alta sensibilidad puede llevar a que sus quejas o inquietudes se perciban como exageradas, pero para ellos son una parte real y dolorosa de su experiencia.
Tu hijo tiene preocupaciones ocultas
Las preocupaciones ocultas son aquellas que el niño no expresa abiertamente, ya sea por temor a ser incomprendido o por no saber cómo verbalizarlas.
Los padres y madres deben estar atentos a cambios en el comportamiento, como retraimiento social, irritabilidad, tristeza o dificultad para concentrarse, ya que pueden ser señales de que algo está ocurriendo en el interior del niño.
A veces, las preocupaciones del niño pueden ser tan profundas que no saben cómo abordarlas o temen que no se les dé importancia.
Evita subestimar sus preocupaciones
Es natural que los padres y madres, preocupados por el bienestar de sus hijos, deseen minimizar las preocupaciones que consideran sin fundamento, usando frases como «no te preocupes, solo es una mala etapa» o «es absurdo que te preocupes por eso».
Sin embargo, al hacer esto, los progenitores pueden invalidar las emociones del niño, lo que lleva a que se sientan incomprendidos y a que sus preocupaciones se profundicen.
Pueden llegar a sentir soledad. Para un niño, cada emoción es válida, y aunque la preocupación pueda parecer trivial desde el punto de vista adulto, para el niño es muy real.
Puedes mejorar la gestión de sus quejas y preocupaciones
El primer paso para abordar las preocupaciones de los hijos es escuchar sin juzgar. Asegúrate de que el niño se sienta entendido. Muestra empatía ante sus quejas y preocupaciones, aunque puedan parecer pequeñas o sin sentido.
Validar sus sentimientos es crucial para que se sientan respaldados y comprendidos. Frases como «entiendo que eso te hace sentir así» o «es normal sentir miedo ante algo desconocido» son más útiles que restar importancia a lo que está pasando.
Es fundamental evitar frases como «eso es solo una etapa» o «no es para tanto». Estas frases pueden hacer que el niño sienta que sus emociones no son importantes, lo que puede llevar a que no expresen sus preocupaciones en el futuro.
En lugar de esto, se deben buscar formas de ayudar al niño a comprender y gestionar sus emociones, reconociendo que sus preocupaciones son reales, aunque no siempre sean proporcionales a la situación.
Habilidades de afrontamiento
Los niños y las niñas necesitan herramientas para enfrentar sus preocupaciones de manera saludable. Enseñarles habilidades de afrontamiento como la respiración profunda, el mindfulness, la resolución de problemas y la modificación del pensamiento, les permitirá ver las situaciones desde una perspectiva más equilibrada.
A través de estas herramientas, los niños pueden aprender a manejar sus emociones de manera más eficaz, desarrollando una mayor resiliencia, es decir, mayor capacidad para hacer frente a las adversidades.
A medida que los niños aprenden a gestionar sus emociones, es importante enseñarles a ver las situaciones de manera más objetiva. Los padres y madres pueden ayudarles a identificar los pensamientos distorsionados que amplifican sus preocupaciones, y guiarlos para que vean las situaciones desde una óptica más racional y menos emocional.
Por ejemplo, si un niño se preocupa por una presentación en la escuela, es posible ayudarle a ver que ha practicado y que lo peor que podría pasar sería cometer un pequeño error, lo cual es completamente normal.
Mayor necesidad de refuerzo positivo
Los niños que se enfrentan a las preocupaciones, especialmente los que tienen alta sensibilidad, pueden necesitar más refuerzo positivo para sentirse seguros.
Fomentar la autoconfianza de los niños mediante el reconocimiento de sus esfuerzos, incluso cuando no logran el resultado perfecto, puede motivarles a seguir enfrentando sus preocupaciones.
Los padres y madres deben resaltar sus logros y su valentía por enfrentar sus miedos, aunque estos parezcan pequeños.
Una comunicación abierta es esencial para que los hijos se sientan cómodos compartiendo sus preocupaciones. Los padres y madres deben crear un ambiente en el hogar donde los niños sepan que sus emociones son bienvenidas y que pueden hablar libremente sin miedo a ser juzgados o criticados.
Evitar la desconexión emocional
Establecer rituales de conversación, como una charla antes de dormir o momentos tranquilos en familia, puede ser útil para abrir canales de comunicación.
En este sentido, el manejo adecuado de las quejas y preocupaciones de los hijos requiere que los padres y madres validen sus emociones, los escuchen de manera empática y les proporcionen herramientas efectivas para manejar sus sentimientos.
Subestimar o minimizar las preocupaciones del niño puede llevar a la desconexión emocional, mientras que proporcionar un entorno de apoyo y objetividad permitirá que el niño desarrolle habilidades para enfrentar las dificultades con confianza y resiliencia.
Al hacerlo, no solo ayudamos a nuestros hijos a superar sus preocupaciones, sino que también les enseñamos valiosas lecciones para la vida.
Dra. Manuela Pérez Chacón, presidenta de PAS España
La Dra. Manuela Pérez Chacón es Licenciada en Psicología con dos especialidades, industrial y clínica, por la Universidad nacional de Educación a distancia. Es Doctora en Psicología de los Recursos Humanos por la Universidad de Sevilla.
En el área de la salud, es fundadora y miembro de la Unidad de Salud Mental del Hospital Jerez Puerta del Sur. Trabaja realizando psicoterapia cognitivo conductual. Pertenece al Colegio de Psicólogos de Andalucía Occidental.
En el área de la Psicología Industrial, es fundadora y miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Técnicos en Prevención de Riesgos Laborales de Andalucía. Trabaja e investiga en riesgos psicosociales. Tiene experiencia como profesora ayudante en la Universidad Internacional de la Rioja.
En el área de la Psicología de la Personalidad, es fundadora y preside la Asociación de Psicólogos y Profesionales de Alta Sensibilidad (PAS España). Trabaja la difusión y divulgación científica de la Sensibilidad de Procesamiento sensorial, colaborando en medios de comunicación, tales como RNE, TVE o El País y ahora con jupsin.com, IPDGrupo.com.
Todo lo que necesitas saber sobre las Personas Altamente Sensibles (PAS)
Nota de la autora: Este texto utiliza lenguaje no sexista. Las referencias a personas o colectivos citados en género masculino, por economía del lenguaje, debe entenderse como un género gramatical no marcado. Cuando proceda, será igualmente válida la mención en género femenino.