La adolescencia se caracteriza por los cambios físicos y psicológicos en los jóvenes al finalizar la etapa de la pubertad, dejando totalmente atrás la niñez para entrar en la edad adulta.
Los jóvenes comienzan a explorarse a sí mismos, desde sus gustos musicales hasta su forma de vestir y a relacionarse con sus pares de forma interpersonal y amorosa. Es una etapa donde comienzan a darse las primeras exploraciones sexuales.
“Factores de riesgo en la adolescencia: los de antaño (que persisten) y los de época (que evolucionan)”
Factores de riesgo
Los adolescentes están en riesgo mientras se desarrollan debido a la formación de su identidad, que conlleva ciertos valores establecidos durante la infancia así como la autoestima que se va estructurando a cada momento de su vida.
Los factores de riesgo de antaño más comunes:
- Los problemas sexuales: Los dramáticos cambios físicos de la adolescencia pueden llegar a ser muy preocupantes para algunos adolescentes, especialmente para aquellos que son tímidos y que no desean hacer preguntas al respecto. En el otro extremo, las preocupaciones pueden ponerse de manifiesto en forma de presunción excesiva tanto sobre su capacidad sexual como sobre sus experiencias. Más de la mitad de los adolescentes tendrán su primera experiencia sexual completa antes de los 16 años. Aunque, cabe destacar que algunos de los adolescentes pueden no estar seguros de su orientación sexual. Esta preocupación puede ser compartida por sus padres.
Más de la mitad de los adolescentes tendrán su primera experiencia sexual completa antes de los 16 años
- Embarazo no deseado: Aquellos que comienzan de forma temprana con relaciones sexuales tienen un mayor riesgo de embarazos no deseados y de problemas de salud. El nuevo riesgo para la salud que supone, por ejemplo, la infección por SIDA constituye una preocupación adicional.
- Infecciones de transmisión sexual (ITS): La mayoría de los adolescentes son bastante cuidadosos a la hora de la elección de sus parejas, tienen múltiples relaciones en algunos casos y la promiscuidad sexual y la relaciones de riesgo repetitivas sin protección suelen ser signo de la presencia de problemas de riesgo y en algunos casos irreversibles, por lo que marcan su integridad física y emocional si no se toman las medidas de precaución adecuadas para una relación sexual saludable. Se transmiten mediante el coito (sexo), ya sea vaginal, oral o anal. En caso de irse a la garganta o boca, se puede transmitir con un beso profundo (intercambio de saliva). Hay algunas que se transmiten con el contacto directo con la piel: El herpes y VPH (Virus del Papiloma Humano). Fisuras en la boca, encilla, jeringas, ojos. Algunas enfermedades venéreas pueden ser transmitidas de una madre infectada a su hijo en el útero (la matriz), durante el parto y a través de la leche materna.
- Adicciones: Si tomamos en cuenta que la adolescencia es una etapa vulnerable por los cambios que se sufre continuamente, podemos asumir que todo adolescente está predispuesto a tener contacto con las drogas. Es importante que para no pasar desapercibidos se tomen en cuenta los siguientes factores de riesgo que impulsan a las adicciones.
Predisposición genética: donde algún miembro directo de la familia cuenta con un historial sobre las drogodependencias (padre, madre), lo cual puede heredarse y dependiendo del tipo de sustancia consumida (alcohol, marihuana, cristal, heroína…) antes o en plena etapa de gestación, será el porcentaje de posible consumo en quien haya heredado dicho riesgo.
Modelamiento: es un aprendizaje que obtienen los niños por medio de la observación e imitación sobre una conducta emitida por parte de una figura representativa del infante (madre, padre, tutor) y la cual puede reproducirse en la adolescencia.
Problemas: todo adolescente sufre crisis con los cambios y esto se usará como pretexto para “resolver” de forma tóxica su inconformidad. Curiosidad: no falta el adolescente explorador que prueba alguna sustancia tóxica para quitarse la duda del consumo.
Presión Social: la forma que destaca entre las generaciones, donde la misma presión de sus pares o de quien haga falta estará ahí para “socorrer” al adolescente que se encuentre vulnerable, donde “si no participas-no perteneces”. Cualquiera puede ser presa de ésta última forma de tener contacto con las drogodependencias.
Factores de riesgo de época
- Bullying: también conocido como acoso escolar, puede afectar psicológica y físicamente a una persona. México es el país número uno en casos de bullying, en la actualidad siete de cada diez niños y jóvenes han experimentado de forma insistente acoso por parte de sus compañeros de clase, desde sobrenombres, insultos, humillaciones, amenazas, hasta llegar a los golpes durante los periodos escolares. Las consecuencias son aterradoras, generando baja autoestima, deserción escolar, trastornos alimenticios, ansiedad, depresión que incluso puede encaminar al suicidio (como única solución) de quienes son víctimas.
- Ciberbullying: Las humillaciones evolucionaron al término ahora denominado ciberbullying o ciberacoso donde se presumen los acosos interpretados como “logros” a través de videos y fotografías, donde cualquier persona tiene fácil acceso a estas burlas, peleas, degradaciones con un solo ‘click’, con el permiso de opinar y compartir el denigrante contenido, convirtiéndolos también en participantes. Ahora todo mundo puede ser testigo del peor momento de tu vida, colgado en la red, con miles de ‘likes’ y otros miles compartidos, sin exagerar, dándole la vuelta al mundo.
El Phubbing se ha filtrado entre nosotros y las personas que queremos: se trata de ignorar por completo a la persona que está a nuestro lado
- Cutting: no solo basta con sufrir acoso escolar o alguna crisis del desarrollo, sino que una forma de liberarla es la conducta de autolesión que utilizan los adolescentes para liberar tensiones o ansiedades.
- Sexting: es una forma de comprometerse con la pareja (o algo parecido) que consiste en envío de fotografías o videos de tipo pornográfico. Generalmente son enviados por parte del remitente pero en ocasiones otras personas participan para que dicho contenido se filtre en otras cuentas de forma delictiva y humillante.
- Grooming: ahora que la red social está al alcance de cualquiera y no restringe a nadie para su manejo, es notorio que los crímenes se ejecuten con facilidad debido a la rapidez con la cual las personas suelen comunicarse hoy en día. El grooming no se ha hecho esperar, pues es una estrategia utilizada por abusadores a través de la red social, la cual consiste en generar confianza con los menores para después abusar de ellos. Generan tanta empatía que son capaces de obtener fotos o videos de desnudos por parte de la víctima e incluso convencerla de un encuentro sexual. En muchas ocasiones utilizan una identidad falsa para poder empatizar con facilidad.
- Phubbing: es rara la persona que no cuente con un dispositivo móvil en la actualidad, es raro que dichas personas no tengan el servicio de internet, lo cual ha mantenido en lejanía a las personas aunque se encuentren a solo centímetros de distancia. El phubbing se ha filtrado entre nosotros y las personas que “queremos”. Se trata de ignorar por completo a la persona que está a nuestro lado. Importa más estar actualizado con lo que ocurre en nuestras redes sociales que disfrutar un momento cara a cara con la persona que se ha tomado el tiempo de venir a acompañarnos, fracturando lazos, fracturando relaciones, fracturando familias.
Linnette Avendaño, desde Mexicali, Nueva California (México) para jupsin.com
El conocimiento nos hace responsables
En fin, la lista de factores no ha disminuido, al contrario, va en aumento y hasta pareciera que va a la par con la actualización de las nuevas tecnologías de la información y comunicaciones (TICs). Más que factores de riesgo se puede decir que son riesgos sociales, nada excluye que un adolescente enfrente la vida bajo riesgo.
El apoyo sensible, la comprensión y sobre todo el AMOR son guía para reforzar la autoestima de sus hijos y con ello las decisiones responsables que puedan tomar cuando una situación de riesgo se les presente
Es obligatorio y de suma importancia que los padres estén enterados de los factores de riesgo que rodean ésta etapa. Se sugiere que tomen precauciones y se acerquen a sus hijos, que les brinden información clara y exacta de los cambios que van a enfrentar.
El apoyo sensible, la comprensión y sobre todo el AMOR son guía para reforzar la autoestima de sus hijos y con ello las decisiones responsables que puedan tomar cuando una situación de riesgo se les presente.
Los adolescentes son vulnerables y el estilo de crianza que otorgan los padres hacía cada uno varía y con esto altera la capacidad de decisión que van estableciendo en relación con sus valores y/o estilos de afrontamiento.
No olvidemos los casos polémicos que han desatado las redes sociales, son el canal para que los adolescentes tengan contacto con cualquier tipo de persona, información, estilo de vida y aspiraciones de las cuales si no se detectan a tiempo aquellas cuyas intenciones son negativas, podría concluir en tragedia.
Invito a las personas a concientizar su responsabilidad sobre el manejo de la información que filtran con otros independientemente del medio en que lo liberen, que todo tiene una consecuencia. Aseguremos a los implicados canalizándolos con expertos en el área de deficiencia para que se prevengan los riesgos y se incrementen las decisiones adecuadas para el beneficio de los implicados. El conocimiento nos hace responsables.
