Capitana de mi alma, ama de mi destino (10)

Capitana de mi alma, ama de mi destino – Judith Obaya – Por la igualdad de la mujer en el deporte – jupsin.com 

Ha llegado el momento de hablaros de mi nueva aventura extrema. Y lo quiero hacer, ‘por la igualdad de la mujer en el deporte’, en el portal jupsin.com, con un NO rotundo al acoso y a la discriminación.

Me estoy preparando para volver muy pronto a Djebel Ouarkziz , la frontera natural entre Marruecos y Sáhara Occidental, para iniciar la misma travesía que realicé en bicicleta en 2017, pero esta vez para correr ‘Running the Sahara’, 1.775 kms. (45 kms. día).

«5:30 horas, patrullando por la ciudad de Oviedo»

Son las 5:30 horas, las noches pasan despacio en el coche patrulla en esta época del año. De jueves a sábado los estudiantes toman el barrio antiguo y Oviedo parece cobrar vida, el resto de la semana la ciudad permanece desierta en las noches.

De jueves a sábado los estudiantes toman el barrio antiguo y Oviedo parece cobrar vida, el resto de la semana la ciudad permanece desierta en las noches

Patrullando por la ciudad, a veces miro a las ventanas de las viviendas donde hay luz y pienso en los años que llevo haciendo turnos, las noches ya pesan.

En la radio suena cualquier canción, cada compañero tiene sus preferencias, a mi me da igual el tipo de música, a esta hora ya no escucho, solo oigo de fondo la melodía mientras por la emisora de radio habla la central con otras patrullas.

Cuando suena nuestro indicativo saltan todas las alarmas en mi cabeza y con la seguridad propia de la experiencia de casi 30 años acudimos al servicio encomendado sin hacernos ninguna pregunta.

Ya estoy acumulando días para volver a Madrid. Las permutas de turnos con compañeros son la única vía para poder desplazarme 15 días al mes a la capital.

Después de la decepción sufrida por el cambio de planes del patrocinador hay que seguir con los entrenos, reuniones, ponencias, entrevistas y todo lo que rodea al hecho de tener que dar a conocer mis proyectos y seguir buscando financiación para ellos.

Tengo suerte de contar con compañeros dispuestos a hacer estas permutas.

Judith Obaya: «Claro que me gustaría que el Ayuntamiento me echase una mano y poder exhibir con orgullo, en mi ropa deportiva, el emblema del cuerpo de Policía Local de Oviedo».

Organización, esfuerzo y mucha disciplina

En muchas entrevistas me preguntan si el Ayuntamiento de Oviedo me ofrece algún tipo de ayuda, económica o en tiempo, para poder entrenar, y se extrañan cuando les digo que no.

Piensan que cualquier otro ayuntamiento se sentiría orgulloso de tener en su plantilla una deportista así y más cuando todo lo que hago es por la noble causa de la igualdad de la mujer. Yo intento justificarlo diciéndoles que hay otros deportistas en el municipio que lo merecen más y que los compañeros podrían sentirse ofendidos si la jefatura tuviese algún tipo de privilegio conmigo.

¿Como puedo hacer entonces todo lo que hago?  Con mucha organización, esfuerzo y disciplina

Claro que me gustaría, como hacen en el Cuerpo Nacional de Policía con los agentes que compiten, que el Ayuntamiento me echase una mano y poder exhibir con orgullo, en mi ropa, el emblema del cuerpo de Policía Local de Oviedo.

¿Como puedo hacer entonces todo lo que hago?  Con mucha organización, esfuerzo y disciplina. Trabajando por las noches, y entrenando durante el día. Si tengo que restar horas a algo, las quito al descanso, en contra de lo que mi preparador físico me dice siempre: “el descanso es tan importante como el entreno”. Pero el día tiene pocas horas para mi y hay que sacrificarse.

Tendría que contratar una tarifa con más minutos… Como las tarifas de móviles (risas).

Judith Obaya: «…mi cabeza estaba centrada ya en las pistas, y a pesar de la locura de los preparativos, me encontraba concentrada y dispuesta a comenzar a correr y devorar kilómetros sin miedo alguno».

Esfuerzo y perseverancia

El último mes fue muy tranquilo en cuanto a entrenamiento, estaba preparando mi cuerpo para el gran esfuerzo que tenía que realizar en Sáhara, mi cabeza estaba centrada ya en las pistas, y a pesar de la locura de los preparativos, me encontraba concentrada y dispuesta a comenzar a correr y devorar kilómetros sin miedo alguno.

Volver al trabajo, la dieta y los entrenos ha sido muy duro psicológicamente

Volver al trabajo, la dieta y los entrenos ha sido muy duro psicológicamente. La incertidumbre de que la carrera pueda volver a ser aplazada tampoco ayuda, pero he de sobreponerme y pensar que nada es fácil ni perfecto, pero todo es posible con esfuerzo y perseverancia.

Los patrocinadores hacen grandes esfuerzos para desembolsar ciertas cantidades de dinero y comprendo la complicada labor del equipo de marketing de cualquier empresa.

La complicidad y entendimiento entre marca y deportista ha de ser muy sincera y clara para obtener los mejores resultados publicitarios y posteriores retornos. Con mi trayectoria en estos últimos años he elaborado un CV claramente exitoso que demuestra lo mucho que valgo como deportista y como persona y mis firmes intenciones de continuar en esta línea.

Judith Obaya: «¡Sed amos de vuestro destino y capitanes de vuestras almas… no lo olvidéis nunca!»

Del desierto del Sáhara… a Nueva York

El mismo día que me comunicaban que la carrera se aplazaba hasta enero me confirmaban que estaba becada para acudir al New York Summit 2018.

¿Existen las casualidades? ¿Sucede todo por algún motivo? no puedo evitar hacerme estas preguntas cuando estoy corriendo.

¿Existen las casualidades? ¿Sucede todo por algún motivo? no puedo evitar hacerme estas preguntas cuando estoy corriendo

Satisfecha por haber obtenido la beca, las emociones vuelven poco a poco estar en su sitio y no me falta ilusión pensando que el NYS es una puerta a los negocios y al conocimiento, y que compartiré unas jornadas con directivos de todo el mundo con ganas de establecer contactos y relaciones profesionales al máximo nivel.

¡Y cómo no… no desaprovecharé la ocasión para hacer unos kilómetros en Central Park!

Hasta el 21 de octubre, que volaré hacia Nueva York, volveré a los caminos de la Casa de Campo. Kilómetros en las mañanas, para terminar en el lago tomando un café con limón y poniendo al día a los camareros que, entusiasmados también con ‘Running the Sahara’, se mantienen al corriente de todas mis zancadas. Y más kilómetros por las tardes, si no hay reuniones a las que acudir o medios de comunicación que atender.

Durante 10 semanas he escrito con mi muy limitada riqueza literaria palabras que quieren trasmitir emociones, inquietudes, ilusiones, sueños… Pero yo también he flaqueado en algunos momentos.

Amos de vuestro destino y capitanes de vuestras almas

Toda la fuerza interior, coraje y valentía que me han traído hasta aquí no evitan que en escasos y cortos momentos de dudas ajenas haya flaqueado. Es en esos momentos cuando me acuerdo de este poema de William Ernts Henley:

En la noche que me envuelve,
negra, como un pozo insondable,
doy gracias al Dios que fuere
por mi alma inconquistable.

En las garras de las circunstancias
no he gemido, ni llorado.

Ante las puñaladas del azar,
si bien he sangrado, jamás me he postrado.

Más allá de este lugar de ira y llantos
acecha la oscuridad con su horror.

No obstante, la amenaza de los años me halla,
y me hallará, sin temor.

Ya no importa cuán recto haya sido el camino,
ni cuantos castigos lleve a la espalda:

Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma.

¡Sed amos de vuestro destino y capitanes de vuestras almas… no lo olvidéis nunca!