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¡Protégete del devastador impacto del ciberacoso sobre tu salud!
Ansiedad, depresión, aislamiento social, trastornos emocionales, fracaso escolar, sueño, hábitos alimentarios y pensamientos suicidas
¡Protégete del devastador impacto del ciberacoso sobre tu salud! La víctima puede sentirse acorralada, no ver la salida y sufrir ansiedad, depresión, aislamiento social, trastornos emocionales.
Las personas que sufren este tipo de acoso, cada vez más frecuente, ven alterados sus patrones de sueño, como cambia su estado de animo e incluso sus hábitos de alimentación. Incluso pueden tener pensamientos suicida.
Te lo contamos en jupsin.com, el portal profesional exclusivo de IPDGrupo.com que te ofrece información para decidir sobre igualdad y salud, contra la discriminación y el acoso.
¡Protégete del devastador impacto del ciberacoso sobre tu salud!
Cualquier tipo de acoso tiene un impacto devastador en el bienestar y la vida de las víctimas. En las escuelas, por ejemplo, el acoso físico es hoy en día un grave problema.
Investigadores afirman que las consecuencias a largo plazo del acoso pueden ser incluso peores que los impactos inmediatos. El acoso puede llegar a provocar cambios en el comportamiento y la personalidad de la víctima.
Prevención y cultura online de respeto
“Con la llegada de Internet, el acoso ha adquirido nuevas dimensiones, al igual que la comunicación en general. En la actualidad, se puede realizar desde la comodidad del propio hogar y la víctima puede que ni siquiera conozca al acosador…
… Sin embargo, aunque los métodos y las vías puedan cambiar, el resultado es igual de grave, e incluso a menudo peor que en el acoso en persona», afirma Josep Albors de ESET España.
ESET, compañía de ciberseguridad, ha analizado las diversas formas de ciberacoso, los efectos reales del abuso y por qué los padres y tutores deben proteger a sus hijos ante el ciberacoso. Es importante la prevención y promover una cultura online de respeto hacia los demás.
Ciberacoso, acoso 24 horas al día
Según el diccionario Merriam-Webster, el ciberacoso es la «publicación electrónica de mensajes malintencionados sobre una persona (como, por ejemplo, un estudiante), a menudo de forma anónima».
Sin embargo, el ciberacoso puede adoptar muchas otras formas y, como tal, implica el uso de la tecnología moderna para acosar, maltratar y atacar a otra persona.
Las víctimas reciben mensajes, textos, publicaciones o comentarios ofensivos en sus teléfonos, redes sociales u ordenadores que les avergüenzan y les hacen sentir mal.
Este abuso puede ocurrir prácticamente las 24 horas del día, y la víctima encuentra poco alivio del comportamiento agresivo, odioso y malintencionado de su acosador.
El delito de ciberacoso
ESET resume el ciberacoso como cualquier contenido online utilizado para dañar a alguien. Además, la forma de intimidación y su enfoque también pueden variar, apuntando a la orientación sexual, apariencia, edad, raza, etnia, religión y más.
En muchos países, el ciberacoso es un delito y sus perpetradores pueden enfrentar varios años de prisión.
Síntomas de ciberacoso
- Angustia, signos de alteración al usar el móvil.
- Evitar mostrar su vida digital.
- Evitar el uso de dispositivos digitales.
- Aislamiento de familiares y ámbito social.
- Evitar reuniones grupales.
- Cambio en el rendimiento académico.
- Cambios de humor.
Consecuencias del ciberacoso
El acoso online puede ser muy perjudicial, especialmente porque a menudo es anónimo y puede tener un gran impacto, ya que los mensajes hirientes publicados en línea pueden ser leídos por cualquier persona.
El ciberacoso puede llevar a que la víctima sienta que no hay escapatoria, una vez que su hogar y su privacidad han sido vulnerados.
Esto tiene un efecto tremendo en la psique de la víctima, ya que el estrés y el estado emocional general pueden afectar a sus patrones de sueño, estado de ánimo y hábitos alimenticios.
Y también pueden provocar ansiedad, depresión, aislamiento social, trastornos emocionales, pensamientos suicidas, fracaso escolar, etc.
El agresor también puede sufrir consecuencias. Además de una pena de cárcel, los agresores pueden pasar malos ratos en la escuela, ser despedidos del trabajo o convertirse ellos mismos en víctimas.
El acoso también progresa
Los primeros casos de proto-ciberacoso podrían ser llamadas telefónicas o mensajes de texto ofensivos, que evolucionaron a algo similar a través de plataformas de mensajería en línea.
El primer caso real de ciberacoso del que tenemos conocimiento fue en 2007 en Estados Unidos, cuando Megan Meier, una niña de 13 años, se suicidó después de que sus vecinos crearon un perfil falso en Myspace para acosarla.
De hecho, un estudio de 2018 encontró que las jóvenes víctimas de ciberacoso tienen el doble de probabilidades de intentar suicidarse o autolesionarse que sus compañeros que no han sido víctimas.
Teléfonos inteligentes y redes sociales
Y eso fue una señal de lo que vendría, porque poco después llegaron los teléfonos inteligentes y una gran cantidad de nuevas redes sociales y servicios de mensajería, creando más entornos.
Y al igual que pasamos de los mensajes de texto a los mensajes online, las formas de acoso también han cambiado, y ahora los acosadores utilizan fotos y videos para maltratar a sus víctimas, erosionando cada vez más la privacidad y los espacios personales seguros.
Debido a la enorme cantidad de usuarios de diferentes redes sociales como Instagram, Snapchat, Discord, Reddit, Twitter y Facebook, las personas están cada vez más expuestas a la amenaza del ciberacoso.
Tu también puedes ser víctima de acoso
El acoso digital ha aumentado en los últimos años, gracias a las redes sociales y al hábito constante que tenemos de publicar y compartir detalles de nuestras vidas en Internet.
Según un estudio de 2013, hasta el 80% de los adolescentes que utilizan las redes sociales comparten información como su ubicación, imágenes y datos de contacto online.
A menos que tengan un perfil privado y conozcan a todas sus conexiones, los menores pueden ser fácilmente rastreados por cualquier persona malintencionada.
Flaming
El flaming es otro método de acoso online, donde los trolls o usuarios malintencionados discuten de forma agresiva para lastimar a la otra persona.
El sexting (envío de contenido sexual) es otra forma de acoso, con consecuencias peligrosas para ambas partes, ya que puede terminar siendo utilizado para chantaje o convertirse en pornografía infantil.
Por último, los ataques de odio son otra forma de ciberacoso que a veces es difícil de rastrear, ya que pueden ser llevados a cabo por los bots.
Estas son situaciones en las que varios usuarios se unen a un servidor de Discord o siguen a un streamer de Twitch, por ejemplo, y llenan el chat de mensajes odiosos, impidiendo que el streamer o los usuarios tengan discusiones normales.
Tolerancia cero
Ya se están desarrollando leyes dirigidas a combatir cualquier tipo de acoso o ciberacoso. Es fundamental establecer la tolerancia cero contra este tipo de delitos.
Los padres deben estar más atentos al delito del acoso y ciberacoso. Deben ser más comprensivos y tienen que hablar más con sus hijos si notan algún signo de malestar o cambios en su comportamiento.
Ante este tipo de delitos, deben recopilar la mayor cantidad de pruebas posible y denunciar cualquier incidente a los administradores de la plataforma en la que se ha producido el acoso, al personal escolar (si es necesario) y a la policía.
También se debe considerar la ayuda médica profesional para las personas afectadas por acoso y ciberacoso, ya que puede tener efectos muy perjudiciales y duraderos para su salud.