NANOENTREVISTA | Raquel Sánchez Ortíz, autora de ‘Lasaña, la araña’
‘Lasaña, la araña’ es mucho más que un cuento infantil contra el bullying, es «una herramienta para que se trate este grave problema en los colegios, con los niños, desde pequeños». Además, su autora, Raquel Sánchez Ortiz, pone un ‘granito de arena’ para ayudar a «fortalecer la comunicación y la confianza en el ámbito familiar».
Lasaña la araña surge después de una terrible noticia en las que un adolescente se quita la vida porque no soporta el acoso al que está sometido en su Instituto
NE’. ¿Cómo surge la idea de crear el libro infantil Lasaña la araña?
RS. ‘Lasaña la araña’ surgió, desgraciadamente, a partir de una de esas terribles noticias en las que un adolescente se quita la vida porque no soporta el acoso al que está sometido en su instituto.
Pensé que esto no era un problema sólo de adolescentes, que toda la sociedad debemos implicarnos y quise aportar mi granito de arena.
El objetivo de ‘Lasaña la araña‘ es fomentar la empatía y la comunicación en los niños y niñas desde chiquititos para evitar casos de acoso cuando crezcan.
La idea es que entiendan el daño que pueden hacer y que no quieran hacerlo y así evitemos que lleguen a ser acosadores. Por otra parte, en el caso de ser víctimas, que cuenten con la confianza para hablarlo con sus padres y profesores y éstos puedan intervenir rápidamente.
Portada del cuento infantil ‘Lasaña, la araña’ contra el bullying
NE’. Lasaña la araña es mucho más que un cuento infantil frente al acoso escolar…
RS. La propuesta de ‘Lasaña, la araña’ es doble. Por un lado, está enfocado a que en los colegios se trate el tema desde pequeños. Intervenir con los adolescentes es fundamental, desde luego, pero si trabajamos con los niños y niñas desde edades tempranas quiero ser optimista y pensar que evitaremos algunos casos cuando lleguen a la adolescencia.
‘Lasaña, la araña’ es más que un cuento infantil contra el acoso escolar, es una manera de fortalecer la comunicación y la confianza en el ámbito familiar
Por otro lado, el cuento está enfocado a ser un recurso más para las familias. Debe ser una puerta abierta para hablar sobre los conflictos que surgen en el cole, sobre los sentimientos que eso provoca en sus hijos, sobre cómo reaccionan antes situaciones de las que son testigos, etc.
Es una manera de fortalecer la comunicación y la confianza en el ámbito familiar.
Mi actividad profesional se centra en realizar animaciones infantiles, talleres y cuentacuentos donde realmente no se da este problema, pero a través de estas actividades puedo contar la historia de ‘Lasaña, la araña’ y extender su mensaje.
La idea se me ocurrió en el ámbito familiar, a partir de las cosas que me contaba mi hija Ibiza que ocurrían en su cole, donde ya con 5 añitos unos niños se metían con otros por su aspecto y se reían de la víctima cuando lloraba.
Evidentemente, ahí no hay la crueldad de los casos que se dan en la adolescencia, pero la víctima lo pasa igualmente mal, sufre, y los acosadores adquieren unas pautas de comportamiento terribles que hay que tratar cuanto antes.
Raquel Sánchez,
Ante el problema del bullying, ¿qué falta, educación, prevención…?
Creo que falta un poco de todo, pero a nivel general, de toda la Sociedad. Creo que se debería hacer una campaña donde se insistiera en que el bullying es sólo un reflejo del acoso que hay en todos los ámbitos.
El familiar, por ejemplo, donde muchas veces hay una persona que es víctima de las “bromas” de los demás por ser el pequeño, el mayor, el del medio, o lo que sea.
El laboral, donde, un compañero de trabajo siempre está haciendo “chistes” sobre los demás, especialmente sobre algunos. En nuestro país nos encanta reír y eso es genial, pero creo que falta aprender que reírse de los demás no está bien.
¿Cuántas veces habéis oído a lo largo de vuestra vida la frase “pero si era una broma, no te enfades”? Con la excusa de que es una broma vale insultar, ridiculizar y hacer sentir mal a otra persona. Y el problema es que si de esas “bromas” no se riera nadie desaparecerían, pero no suele ocurrir, siempre hay quien se ríe lo cual hace sentir a la víctima peor, más triste, más sola y más indefensa.
Por otra parte, también somos muy tendentes a criticar a los demás, vecinos, amigos o personajes televisivos. Si nuestros hijos ven que nos metemos con tal o con cual por su aspecto físico, por sus defectos o por lo que sea, ¿cómo podemos esperar que nos hagan caso si luego les decimos que no se metan ellos con sus compañeros?
Los niños aprenden en gran parte por imitación y los padres somos sus modelos favoritos. Si queremos evitar el problema del acoso o bullying en la infancia y la adolescencia hay que intentar evitarlo también entre los adultos.
Inspirada por su hija, Ibiza, Raquel ha comenzado a escribir sus propios cuentos para contribuir a un mundo más amable
De buena tinta… Raquel Sánchez, El Hada Adormilada
Raquel Sánchez Ortiz nació en Zaragoza en 1977. Estudió Ciencias de la Comunicación, Imagen y Sonido, Relaciones Laborales, Interpretación Actoral y Educación Infantil.
Tiene su propia empresa de animaciones infantiles, Abrakadabrafiestas, y últimamente se ha centrado en contar cuentos con su personaje ‘El Hada Adormilada’. A raíz de esta labor e inspirada por su hija, Ibiza, ha comenzado a escribir sus propios cuentos con la intención de contribuir, aunque sea un poquito, a que el mundo sea un lugar más amable.
Raquel Sánchez, autora de ‘Lasaña, la araña’, en Nueva York
